“Hay una seria crisis en lo que es la percepción de confianza de la ciudadanía en el sistema de justicia en general”. Estas fueron las primeras declaraciones del exfiscal Pablo Norambuena en el programa “Estado Nacional” de TVN, donde abordó la crisis en el Ministerio Publico por la situación de los ministros suspendidos de la Corte de Apelaciones de Rancagua y la denuncia del fiscal de la unidad de Alta Complejidad de la región de O’Higgins, Sergio Moya, contra el fiscal regional, Emiliano Arias, por el supuesto tráfico de influencias en el caso Caval.
Norambuena sostuvo que estas situaciones “han revelado situaciones de esta relación impropia entre la política y la Fiscalía, aparece justamente un escenario bastante negativo respecto de las altas autoridades de la Fiscalía”.
Para el expersecutor del caso SQM, existe un “un serio problema de dirección en la Fiscalía y de liderazgo” y apuntó directamente el fiscal nacional Jorge Abbott.
“El fiscal nacional no ha aparecido a darle una explicación a la sociedad, a la comunidad, de lo que está pasado (…) ha faltado un tema de liderazgo por parte de Jorge Abbott para poder dar conducción, dar tranquilidad a la sociedad de que esto se va a investigar a fondo y que se va a saber efectivamente lo que sucedió”, afirmó.
El exfiscal señaló que “hay poca credibilidad respecto de lo que pueda venir haciendo el fiscal nacional, sobre todo porque su conexión con la política es muy directa (…) tiene un vicio de origen en cuanto a su ingreso al cargo, que dice relación con un concurso público que todos sabemos está bastante cuestionado dado que él mantuvo una serie de reuniones privadas con senadores antes de las entrevistas que contempla la Constitución y la ley”.
“Con su asunción se empezó a definir un camino diría yo lamentablemente de renuncia por parte de la fiscalía de sanciones importantes respecto de personas poderosas vinculadas a la política, que finalmente ha terminado en muchos casos en la impunidad”, agregó.
Como ejemplo de este “camino”, Norambuena criticó la reunión que sostuvo Abbott con el senador Juan Pablo Letelier: “Él se reúne con el senador, después de esa reunión saca su formato tipo de desvinculación de fiscales y saca a los dos fiscales de la causa respecto de los ministros de la Corte de Apelaciones de Rancagua”.
De todos modos, el abogado indicó que Abbott aún “tiene la oportunidad de ser ingrato con quienes lo eligieron. Tiene una oportunidad de dar un vuelco de 180 grados respecto de lo que está haciendo la fiscalía en el ámbito de las investigaciones de corrupción y poderosos”.
Respecto del enfrentamiento entre los fiscales Moya y Arias, el expersecutor declinó pronunciarse “respecto de la credibilidad de uno o del otro”. “Aquí tiene que funcionar la institucionalidad, la investigación administrativa como la penal. El fiscal Moya ha hecho una denuncia, donde da cuenta de hechos que tienen una gravedad, pero por otro lado el fiscal Arias también ha señalado que no es efectivo y goza de la presunción de inocencia”, agregó.
Norambuena sostuvo que estas situaciones “han revelado situaciones de esta relación impropia entre la política y la Fiscalía, aparece justamente un escenario bastante negativo respecto de las altas autoridades de la Fiscalía”.
Para el expersecutor del caso SQM, existe un “un serio problema de dirección en la Fiscalía y de liderazgo” y apuntó directamente el fiscal nacional Jorge Abbott.
“El fiscal nacional no ha aparecido a darle una explicación a la sociedad, a la comunidad, de lo que está pasado (…) ha faltado un tema de liderazgo por parte de Jorge Abbott para poder dar conducción, dar tranquilidad a la sociedad de que esto se va a investigar a fondo y que se va a saber efectivamente lo que sucedió”, afirmó.
El exfiscal señaló que “hay poca credibilidad respecto de lo que pueda venir haciendo el fiscal nacional, sobre todo porque su conexión con la política es muy directa (…) tiene un vicio de origen en cuanto a su ingreso al cargo, que dice relación con un concurso público que todos sabemos está bastante cuestionado dado que él mantuvo una serie de reuniones privadas con senadores antes de las entrevistas que contempla la Constitución y la ley”.
“Con su asunción se empezó a definir un camino diría yo lamentablemente de renuncia por parte de la fiscalía de sanciones importantes respecto de personas poderosas vinculadas a la política, que finalmente ha terminado en muchos casos en la impunidad”, agregó.
Como ejemplo de este “camino”, Norambuena criticó la reunión que sostuvo Abbott con el senador Juan Pablo Letelier: “Él se reúne con el senador, después de esa reunión saca su formato tipo de desvinculación de fiscales y saca a los dos fiscales de la causa respecto de los ministros de la Corte de Apelaciones de Rancagua”.
De todos modos, el abogado indicó que Abbott aún “tiene la oportunidad de ser ingrato con quienes lo eligieron. Tiene una oportunidad de dar un vuelco de 180 grados respecto de lo que está haciendo la fiscalía en el ámbito de las investigaciones de corrupción y poderosos”.
Respecto del enfrentamiento entre los fiscales Moya y Arias, el expersecutor declinó pronunciarse “respecto de la credibilidad de uno o del otro”. “Aquí tiene que funcionar la institucionalidad, la investigación administrativa como la penal. El fiscal Moya ha hecho una denuncia, donde da cuenta de hechos que tienen una gravedad, pero por otro lado el fiscal Arias también ha señalado que no es efectivo y goza de la presunción de inocencia”, agregó.
