Andrés Santelices Gálvez, dirección de Innovación Ingeniería de la Universidad del Desarrollo, presidente ONG Educleta.
Desde la creación del Decreto del Ministerio de Transportes en el año 2018, que estableció el último viernes de septiembre de cada año como el “Día Nacional Sin Automóvil”, se abrió la posibilidad de generar una jornada de reflexión sobre cómo nos movemos y qué tan sustentable es la movilidad urbana en nuestro país.
En ese sentido, se ha convertido y consolidado como una gran instancia de invitación a dejar por un día el auto en casa y optar por otros modos de desplazamiento, para incentivar a la ciudadanía a que se utilicen medios de transportes amigables con el medio ambiente, junto con concientizar sobre el impacto negativo que tiene en nuestra ciudad el uso indiscriminado del automóvil.
En Chile la mayoría de los viajes diarios se producen en modo peatón, pese a que no siempre la infraestructura es amigable y suficiente para quienes optan por la caminata. Misma situación ocurre con los vehículos no motorizados como la bicicleta, cuyos viajes diarios superan el millón, pero no goza de ciclo facilidades acordes a la demanda. De hecho, la cantidad de kilómetros de ciclovías está muy por debajo de lo requerido.
Es por ello, que se requiere generar políticas públicas que garanticen el derecho a la ciudad de todos los modos de transporte y en especial de aquellos no motorizados. Así como el Gobierno está desarrollando una excelente gestión del transporte público en Chile, se requiere también implementar programas y leyes que promuevan a que aquellas personas que caminan o pedalean puedan moverse en la ciudad de forma segura, eficiente y cómoda.
Andrés Santelices Gálvez, dirección de Innovación Ingeniería de la Universidad del Desarrollo, presidente ONG Educleta.