Dado que un 80% de la red de distribución eléctrica es aérea, una de las principales causas de interrupción del suministro está relacionada con la vegetación que crece bajo o en el entorno del tendido eléctrico. Esto, sumado a condiciones climáticas extremas como las que hemos visto en los últimos años, provoca la caída de árboles de gran tamaño o ramas sobre las redes, causando considerables daños en la infraestructura eléctrica.
Es por ello que Enel Distribución ejecuta un plan de manejo de arbolado que apunta a prevenir y enfrentar contingencias de cara al invierno. Entre septiembre de 2024 y la primera quincena de marzo de 2025, las cuadrillas especializadas de la compañía despejaron cerca de 70 mil árboles en coordinación con los 33 municipios de su zona de concesión en la Región Metropolitana.
Previo al plan de manejo de arbolado, se realizan inspecciones aéreas sobre la red con helicóptero y drones acondicionados especialmente con tecnología de última generación, como los sensores RGB que con sus cámaras permiten tomar fotografías de alta resolución, logrando identificar en forma precisa los puntos de la red que requieren atención y la tecnología LiDAR que puede determinar distancias entre la red eléctrica y objetos que estén en sus proximidades, como por ejemplo la vegetación, y así definir trabajos preventivos como son el despeje de especies arbóreas que, debido a su altura y proximidad, podrían representar un peligro para la red eléctrica.
“Nuestro plan preventivo de poda es fundamental para disminuir eventuales cortes de suministro, especialmente en los meses de invierno. En los últimos meses hemos reforzado los trabajos para enfrentar de la mejor manera posible los eventuales riesgos asociados al cambio climático”,explicó Francisco Messen, gerente de Operación y Mantenimiento de Enel Distribución.
Según la normativa, las empresas distribuidoras deben mantener la infraestructura eléctrica en buen estado, lo que incluye la poda de los árboles bajo las líneas eléctricas como aquellos ubicados en la franja de seguridad, a fin de lograr una distancia segura entre el tendido eléctrico y la vegetación. En el caso de árboles que están fuera de la franja de servidumbre, por ejemplo, en la vereda del frente a la cual se ubican los postes, dichos árboles en proyección sobre el tendido eléctrico, al igual que los que están emplazados dentro de una propiedad privada, son estos y/o los municipios los responsables de realizar podas/talas, según corresponda, para evitar riesgos que puedan afectar a la comunidad y/o al tendido eléctrico.
Para lo anterior, los municipios cuentan con programas propios de despeje, particularmente de los árboles que, ubicados frente al tendido eléctrico, por su altura y envergadura, pueden caer en proyección sobre las redes eléctricas y dañarlas gravemente. En este sentido, Enel Distribución se encuentra desarrollando actividades concretas de prevención en coordinación directa con varios municipios de su zona de concesión.
Para llevar a cabo el plan de poda, es necesario evaluar el estado de los árboles cercanos a la red eléctrica, para luego definir los trabajos a ejecutar, los que se realizan por etapas y en ciclos, utilizando técnicas apropiadas que protegen la salud de las distintas especies, identificando su estado fitosanitario, tipo de copa y forma de crecimiento entre otros. En ese sentido, la correcta intervención de las ramas implica su corte desde la base, evitando con ello dejar muñones con rebrotes que puedan proyectarse en el futuro hacia el tendido eléctrico.
Cabe señalar que las cuadrillas de Enel Distribución se encuentran capacitadas para realizar este tipo de labores, implementando todas las medidas de seguridad, tanto para los trabajadores que realizan la labor de poda como para el entorno, que el uso de motosierras requiere, utilizando los equipos adecuados de acuerdo a las circunstancias, así como los elementos de seguridad personal como ropa anti cortes y protectores faciales destinados a evitar la ocurrencia de accidentes.
Desde el último trimestre de 2024, Enel Distribución está realizando coordinaciones con las municipalidades de la zona de concesión, a fin de focalizar los esfuerzos de poda y despeje en aquellas áreas que las propias comunas han identificado como prioritarias. También ha desarrollado talleres de capacitación de personal municipal para gestión de crisis en cercanías de redes eléctricas, los que se seguirán replicando en el transcurso del año.