El sismo de 5,4 grados de magnitud registrado a las 3:15 de la madrugada de este miércoles en el centro de Chile abarcó cinco regiones, sin ocasionar víctimas o daños de consideración, según informaron las autoridades.
La sacudida de tierra se extendió a lo largo de 800 kilómetros del territorio chileno y se percibió en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins y Maule, con intensidades de VI a II en orden descendente, según la escala de Mercalli.
En Santiago la intensidad fue VI y despertó a los casi siete millones de habitantes de la capital, aunque no se reportaron daños materiales visibles ni cortes en el suministro de servicios básicos.
El epicentro se localizó a 5 kilómetros al este de Colina, con el hipocentro a 998,7 kilómetros de profundidad, según el Centro Sismológico de la Universidad de Chile.
En tanto, el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) lo situó a 88,2 kilómetros bajo la superficie y calculó la magnitud del sismo en 5,5 grados Richter.
El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada descartó a los pocos minutos de ocurrido el sismo la posibilidad de un tsunami en las costas de Chile.
Más de un centenar de localidades de las cinco regiones señaladas fueron afectadas por la onda sísmica, y las mayores intensidades correspondieron, según la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), a Santiago y Melipilla, con grado VI.
En Cartagena, El Quisco, El Tabo, San Antonio, Santo Domingo, Quillota, Zapallar y Villa Alemana, en la región de Valparaíso, la intensidad fue grado V, lo mismo que en El Monte, Paine y Puente Alto, Talagante y Tiltil, en la región Metropolitana, y en Coltauco y Navidad, en la región de O’Higgins.
En la región de Coquimbo la intensidad fluctuó entre grado III y II; en la de Valparaíso entre V y IV; en la de O’Higgins entre V y III y la de Maule, entre III y II.
“No se reportan daños a personas, alteración de servicios básicos o infraestructura producto de este sismo”, puntualizó la Onemi.
La sacudida de tierra se extendió a lo largo de 800 kilómetros del territorio chileno y se percibió en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins y Maule, con intensidades de VI a II en orden descendente, según la escala de Mercalli.
En Santiago la intensidad fue VI y despertó a los casi siete millones de habitantes de la capital, aunque no se reportaron daños materiales visibles ni cortes en el suministro de servicios básicos.
El epicentro se localizó a 5 kilómetros al este de Colina, con el hipocentro a 998,7 kilómetros de profundidad, según el Centro Sismológico de la Universidad de Chile.
En tanto, el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) lo situó a 88,2 kilómetros bajo la superficie y calculó la magnitud del sismo en 5,5 grados Richter.
El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada descartó a los pocos minutos de ocurrido el sismo la posibilidad de un tsunami en las costas de Chile.
Más de un centenar de localidades de las cinco regiones señaladas fueron afectadas por la onda sísmica, y las mayores intensidades correspondieron, según la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), a Santiago y Melipilla, con grado VI.
En Cartagena, El Quisco, El Tabo, San Antonio, Santo Domingo, Quillota, Zapallar y Villa Alemana, en la región de Valparaíso, la intensidad fue grado V, lo mismo que en El Monte, Paine y Puente Alto, Talagante y Tiltil, en la región Metropolitana, y en Coltauco y Navidad, en la región de O’Higgins.
En la región de Coquimbo la intensidad fluctuó entre grado III y II; en la de Valparaíso entre V y IV; en la de O’Higgins entre V y III y la de Maule, entre III y II.
“No se reportan daños a personas, alteración de servicios básicos o infraestructura producto de este sismo”, puntualizó la Onemi.
