Mauricio Isla podría podría dejar anticipadamente el Fenerbahce de Turquía para arribar en un grande del fútbol sudamericano.
Según dio a conocer TyC Sports, el histórico lateral de la Selección chilena sería pretendido nada menos que por Boca Juniors y por el legendario Juan Román Riquelme, recientemente elegido como segundo vicepresidente y principal responsable del fútbol en el club.
“Mauricio Isla sería uno de los primeros apuntados por Juan Román Riquelme para reforzar el plantel de Boca para el año que viene. El lateral derecho chileno juega en Fenerbahce y su contrato vence en junio de 2020, por lo que habrá que ver cuánto pide el equipo turco”, publicó el citado medio.
“Desde el entorno del futbolista aseguraron que hasta el momento no recibieron ningún llamado y que la idea tampoco sería emigrar, aunque reconocieron que un club tan importante podría cambiar los planes. Incluso, creen que el llamado del vicepresidente segundo electo lo movilizaría para evaluar la chance”, añadió.
Por último, sostuvo: “La clave de la negociación podría ser el vínculo que finaliza en seis meses, ya que Fenerbahce no querrá perderlo por la libertad de acción”.
Según dio a conocer TyC Sports, el histórico lateral de la Selección chilena sería pretendido nada menos que por Boca Juniors y por el legendario Juan Román Riquelme, recientemente elegido como segundo vicepresidente y principal responsable del fútbol en el club.
“Mauricio Isla sería uno de los primeros apuntados por Juan Román Riquelme para reforzar el plantel de Boca para el año que viene. El lateral derecho chileno juega en Fenerbahce y su contrato vence en junio de 2020, por lo que habrá que ver cuánto pide el equipo turco”, publicó el citado medio.
“Desde el entorno del futbolista aseguraron que hasta el momento no recibieron ningún llamado y que la idea tampoco sería emigrar, aunque reconocieron que un club tan importante podría cambiar los planes. Incluso, creen que el llamado del vicepresidente segundo electo lo movilizaría para evaluar la chance”, añadió.
Por último, sostuvo: “La clave de la negociación podría ser el vínculo que finaliza en seis meses, ya que Fenerbahce no querrá perderlo por la libertad de acción”.