El vicepresidente Mike Pence, como presidente de la Cámara alta, tuvo que deshacer el empate a 50 votos entre republicanos y demócratas, ya que las senadoras conservadoras Susan Collins y Lisa Murkowski votaron en contra de la moción.
Los republicanos del Senado no se ponen de acuerdo sobre cómo tumbar la reforma sanitaria conocida como Obamacare, por lo que, ante las presiones del presidente Donald Trump, el líder de la mayoría convocó este voto para iniciar el debate, sin un texto concreto, algo que normalmente no suele tener ningún peso ni dificultad para prosperar.
Y es que, hasta el momento, los tres proyectos legislativos presentados para ello no logran consensuar a los republicanos, quienes tienen la mayoría en el Senado pero no son capaces de acordar una salida viable para cumplir una de las principales promesas de campaña del magnate.
En la votación, destacó el voto crucial del senador republicano por Arizona, John McCain, diagnosticado recientemente con un cáncer cerebral y quien, tras su intervención, regresó a Washington exclusivamente para la sesión de hoy.
Pese a su delicada condición, McCain votó a favor de comenzar el debate para derogar la ley sanitaria, a pesar de que todas las alternativas a la misma hasta ahora planteadas provocarían que al menos unos 24 millones de personas perdieran su seguro médico en los próximos 10 años.
Todos los demócratas, junto a Collins y Murkowski, votaron en contra de comenzar el debate.
Sin embargo, una media docena de republicanos mantuvieron la duda hasta el último momento, ya que se han mostrado en contra de todas las alternativas legislativas presentadas hasta ahora.
Por ello, esta pequeña victoria no garantiza que los republicanos logren aprobar texto alguno para derogar Obamacare, aunque han logrado mantener viva esa posibilidad.