Hace exactamente 4 años el nombre de Edward Snowden se hizo mundialmente conocido, luego que el 9 de junio de 2013 el exfuncionario de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) confesó ser la fuente de los diarios The Guardian (Reino Unido) y The Washington Post (EE.UU), que revelaron que el gobierno norteamericano espiaba a sus ciudadanos a través del teléfono y cuentas de internet.
El informante rápidamente se convirtió en el enemigo número uno de Estados Unidos e intento buscarlos para juzgarlo, pero Snowden ya había huido a Hong Kong y dos semanas después voló a Rusia para pedir asilo.
Esta situación provocó tensión entre ambos países y, a cuatro años del hecho, la situación volvió al tapete tras la polémica relación del Presidente Donald Trump con Vladimir Putin.
Apropósito de ello, Constanza Fernández, directora Administración Pública de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad San Sebastián, señaló al diario La Nación que la situación ocurrida en 2013 “fue absolutamente relevante, porque puso en cuestionamiento las estrategias que estaba utilizando tanto la CIA como la NSA y generó esta bola de nieve que estamos viendo hoy día de la relación, específicamente de Donald Trump con Rusia”.
Asimismo, afirmó que “esta relación aún no la tenemos tan clara, porque en el fondo se ha dicho muchísimo que Snowden trabajó como agente doble, apoyando a Rusia, y ahí se generan muchos rumores de que las filtraciones y las intervenciones que probablemente hubo en las últimas elecciones en EE.UU. pueden haber tenido relación con él. Incluso, él ha dicho que espera poder tener la nacionalidad rusa pronto”.
Al ser consultado de qué manera quedará el nombre de Edward Snowden en la historia, Fernández respondió que “eso va a depender de la misma historia, pero para Estados Unidos es un traidor a la patria y la lógica de pedir la extraditarlo es juzgarlo como tal. Si lo vemos desde el punto de vista de países no tan occidentalizados, es al revés, es como el salvador que llegó a contar la verdad y decir las cosas terribles que hace Estados Unidos”.
“Ahora la relación de EE.UU. con Rusia está súper compleja. Cuando asumió Trump, la relación era bastante fluida y cercana, pero luego se dio cuenta que eso generaba anticuerpos a nivel nacional, entonces ha intentado alejarse de Rusia. Incluso el ataque a Siria tuvo que ver con mostrarse contra Rusia. Pero ahora estamos de nuevo en una situación donde se nota una cercanía”, afirmó.
“En general, esto nos hizo abrir los ojos a la industria de la seguridad informática de que aunque la gente se sienta segura, no estamos en un mundo seguro. Eso lo vivimos con el virus Wanna Cry el mes pasado. Todas estas cosas lo que hacen es finalmente mostrarnos la realidad, que es que estamos en un mundo súper conectado sin las medidas de seguridad a los niveles que los debiéramos tener”, agregó.
El experto en seguridad informática también hizo un análisis de cómo está esta materia en Chile y especialmente en las instituciones gubernamentales. “Hay instituciones que están más avanzadas, que cuidan más la información más privada. En el Gobierno hay una gran disparidad, por ejemplo, entre el Registro Civil o Impuestos Internos comparados con una municipalidad chica que a lo mejor tiene un sitio web y no protege nada. Si nos vamos a los sectores, digamos que la banca está bien, está a niveles internacionales. Comparados con los bancos grandes Estados Unidos aún estamos bien atrás, pero la banca está despierta y tienen una Superintendencia que vigila y ve que estas cosas vayan avanzando. Pero hay otros sectores que no, que a lo mejor están protegidos con un firewall y punto, y hay muchos ataques que los sobrepasan. Creo que en general estamos avanzando en un grado de madurez”, afirmó.
El informante rápidamente se convirtió en el enemigo número uno de Estados Unidos e intento buscarlos para juzgarlo, pero Snowden ya había huido a Hong Kong y dos semanas después voló a Rusia para pedir asilo.
Esta situación provocó tensión entre ambos países y, a cuatro años del hecho, la situación volvió al tapete tras la polémica relación del Presidente Donald Trump con Vladimir Putin.
Apropósito de ello, Constanza Fernández, directora Administración Pública de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad San Sebastián, señaló al diario La Nación que la situación ocurrida en 2013 “fue absolutamente relevante, porque puso en cuestionamiento las estrategias que estaba utilizando tanto la CIA como la NSA y generó esta bola de nieve que estamos viendo hoy día de la relación, específicamente de Donald Trump con Rusia”.
Asimismo, afirmó que “esta relación aún no la tenemos tan clara, porque en el fondo se ha dicho muchísimo que Snowden trabajó como agente doble, apoyando a Rusia, y ahí se generan muchos rumores de que las filtraciones y las intervenciones que probablemente hubo en las últimas elecciones en EE.UU. pueden haber tenido relación con él. Incluso, él ha dicho que espera poder tener la nacionalidad rusa pronto”.
Al ser consultado de qué manera quedará el nombre de Edward Snowden en la historia, Fernández respondió que “eso va a depender de la misma historia, pero para Estados Unidos es un traidor a la patria y la lógica de pedir la extraditarlo es juzgarlo como tal. Si lo vemos desde el punto de vista de países no tan occidentalizados, es al revés, es como el salvador que llegó a contar la verdad y decir las cosas terribles que hace Estados Unidos”.
“Ahora la relación de EE.UU. con Rusia está súper compleja. Cuando asumió Trump, la relación era bastante fluida y cercana, pero luego se dio cuenta que eso generaba anticuerpos a nivel nacional, entonces ha intentado alejarse de Rusia. Incluso el ataque a Siria tuvo que ver con mostrarse contra Rusia. Pero ahora estamos de nuevo en una situación donde se nota una cercanía”, afirmó.
“UN MUNDO CONECTADO SIN MEDIDAS DE SEGURIDAD”
Pero las infiltraciones de Snowden también impactaron al mundo de la seguridad informática. Miguel Pérez, CEO de NovaRed y experto en seguridad informática, expresó a La Nación que este hecho “fue súper importante, porque este sujeto mostró cómo en la seguridad más completa del planeta, que es EE.UU., un empleado de ellos va y revela información. Entonces todos se preguntaron cómo están protegiendo la información, porque estos eran los organismos de inteligencia de Estados Unidos”.“En general, esto nos hizo abrir los ojos a la industria de la seguridad informática de que aunque la gente se sienta segura, no estamos en un mundo seguro. Eso lo vivimos con el virus Wanna Cry el mes pasado. Todas estas cosas lo que hacen es finalmente mostrarnos la realidad, que es que estamos en un mundo súper conectado sin las medidas de seguridad a los niveles que los debiéramos tener”, agregó.
El experto en seguridad informática también hizo un análisis de cómo está esta materia en Chile y especialmente en las instituciones gubernamentales. “Hay instituciones que están más avanzadas, que cuidan más la información más privada. En el Gobierno hay una gran disparidad, por ejemplo, entre el Registro Civil o Impuestos Internos comparados con una municipalidad chica que a lo mejor tiene un sitio web y no protege nada. Si nos vamos a los sectores, digamos que la banca está bien, está a niveles internacionales. Comparados con los bancos grandes Estados Unidos aún estamos bien atrás, pero la banca está despierta y tienen una Superintendencia que vigila y ve que estas cosas vayan avanzando. Pero hay otros sectores que no, que a lo mejor están protegidos con un firewall y punto, y hay muchos ataques que los sobrepasan. Creo que en general estamos avanzando en un grado de madurez”, afirmó.
