Primero, la directora gerente (CEO) del Banco Mundial, Kristalina Georgieva, envió una carta al ministro Eyzaguirre donde calificó como “desafortunado que el señor Paul Romer en una entrevista con el Wall Street Journal haya cuestionado el ranking Doing Business, en particular para Chile”.
“No tenemos ninguna evidencia que demuestre que la metodología fue manipulada en desfavor de Chile o que algún cambio en la metodología fue introducido por alguna razón más allá de una técnica con el fin de mejorar la calidad del reporte”, añadió.
Asimismo, indicó que “esta no es la visión del Banco Mundial. Confiamos plenamente en la integridad de la investigación del Banco y estamos seguros de la metodología y de los rankings del reporte Doing Business”.
Finalmente, sostuvo que la “metodología del Doing Business se aplicó de forma apropiada para determinar el ranking de Chile”.
A su vez, en su blog, el economista jefe del Banco Mundial publicó que “en una conversación con un periodista, hice comentarios sobre el informe Doing Business que daba la impresión de que sospechaba manipulación política o parcialidad”.
“Esto no fue lo que quise decir o pensé que dije. No he visto ningún signo de manipulación de los números publicados en el informe Doing Business ni en ningún otro informe del Banco”, añadió Paul Romer.
“Lo que sí quería decir es algo que muchos de nosotros en el Banco creemos: que podríamos hacer un mejor trabajo al explicar lo que significan nuestros números”, agregó.
También señaló que “en la producción del informe Doing Business, cambiamos nuestros métodos por razones sólidas. Estos cambios fueron cuidadosamente considerados. Pero cuando implementamos los cambios, podríamos haber explicado más claramente por qué, por ejemplo, cayó el ranking de Chile.
“Ya hemos hecho que DB 2018 sea más fácil de entender al seguir con los métodos de DB 2017. Para ser más transparentes, también hemos publicado más los datos subyacentes y más detalles detrás de los cálculos”, indicó.
“Por supuesto, siempre habrá espacio para explicarnos más claramente. Lamento que en mi intento de promover la claridad, yo mismo no estaba claro”, concluyó.