La cantante británica y la estadounidense se enfrentarán en Grabación del Año, Disco del Año y Canción del Año, las tres categorías principales de la premiación, cuya vitrina en esta ocasión puede servir para que las estrellas entren en el tenso debate político estadounidense.

El R&B mezclado con hip hop y sazonado con rock y pizcas de soul de Beyoncé o las poderosas baladas rompecorazones del mejor pop de Adele. Esas son las dos cartas favoritas para ganar en las categorías más importantes de los Premios Grammy que se realizarán este domingo.

Las cantantes se enfrentan en Grabación del Año, Disco del Año y Canción del Año, las tres categorías principales de la premiación, cuya vitrina en esta ocasión puede servir para que las estrellas entren en el tenso debate político estadounidense.

Por una parte se encuéntrala 20 veces ganadora del Greammy, Beyoncé, quien lidera las nominaciones del gramófono de oro con nueve y hará su primera aparición pública desde que se supo de su embarazo.

La cantante estadounidense de 35 años, es una de las principales fuerzas de esta temporada de premios musicales gracias a su “Lemonade”, osada y provocativa propuesta, que entrelazó con una película. El álbum es una exploración de la experiencia de la mujer afroestadounidense, en la que aborda temas como la infidelidad y la brutalidad policial.

Pero su camino al triunfo no será fácil, ya que frente a ella se encuentra otra de las favoritas, la Adele, quien busca pelear las principales categorías con su éxito de ventas “25”, LP que ha sido el disco más vendido del mundo desde que la misma británica lanzó “21”, que ganó Mejor Álbum del año en 2012.

Y aunque son los nombres más fuertes, no compiten solas, ya que en la categoría también se encuentran el rapero canadiense Drake, que rompió el récord en plataformas streaming con sus canciones bailables.

Tampoco se queda atrás el “Purpose” de Justin Bieber, con el que logró revivir y darle frescura a su sonido con ayuda de productores electrónicos, y el trabajo “A Sailor’s Guide to Earth” de Sturgill Simpson, quien le dio una pincelada intelectual a la música country con letras inspiradas en la filosofía budista.

¿Escenario anti Trump?

En esta ocasión, la música no es lo único que une a los candidatos por los gramófonos. Muchos artistas convocados al Grammy también comparten su rechazo al Presidente Donald Trump.

Beyoncé, Adele y Drake han criticado el discurso antiinmigrantes del magnate republicano. Además, en el espectáculo del domingo participarán cantantes como Katy Perry y Lady Gaga, que hicieron campaña por Hillary Clinton.

Se espera que Perry estrene sobre el esenario su nueva canción “Chained to the Rhythm” luego del frenesí que creó con las pistas que reveló en Twitter, donde es la persona con más seguidores del mundo.

Lady Gaga por su parte tendrá una única y poco común participación en la gala, pues tocará con la legendaria banda metal Metallica. Su presentación viene una semana después de que cantara en el medio tiempo del Superbowl ante una audiencia de 117 millones de televidentes, en la que dio un mensaje de aceptación social.

Además, la ceremonia marcará el regreso a los escenarios de los franceses Daft Punk, duo electrónico que no ha tocado en público desde la edición de 2014.

Finalmente, los fallecidos íconos de la música Prince y George Michael tendrán esa noche su tributo.