Joaquín Bustos murió a los 27 años por una hemorragia cerebral y la familia solo pudo donar los riñones, pero se perdieron el corazón, los pulmones, el hígado y el páncreas, debido a la falta de avión que los trasladara desde Temuco a los lugares donde se requerían.
Esta situación fue calificada como grave por el diputado Celis, quien indicó que “evidencia que el sistema de trasplante no funcionó y falló a pesar de la voluntad del joven y su familia. Al parecer el sistema y el ministerio nos dicen que sólo se podrían donar órganos de lunes a viernes. Es inaceptable”.
El parlamentario agregó que “me comuniqué con el gabinete del ministro Mañalich para tener información de lo que pasó, los que me señalaron que se intentó gestionar el transporte aéreo tanto en la FACH como en privados y en ninguno de los casos se logró contar con un avión“.
“Esto deja en evidencia lo extremadamente débil del sistema o la poca gestión que existe dentro del ministerio para evitar que este tipo de situaciones sucedan. Igual me parece delicado que la FACH no hiciera lo imposible por contar con trasporte”, agregó.
Celis puntualizó que “este lunes pediré que se cite al encargado nacional de Trasplante para que explique en la Comisión de Salud, qué pasó en este caso”.
“Las cifras de trasplante de Chile aún son muy bajas como para darse el lujo de perder órganos por falta de transporte. Esto me parece de una gravedad que compromete todo los esfuerzos, campañas, recursos y motivación de la población en donar órganos”, concluyó.