La Junta Oficial de Diáconos de la Catedral Evangélica de Chile inició en la noche del sábado un proceso de destitución de su obispo presidente Eduardo Durán Castro, por usar los diezmos para darse una “vida de lujo personal” y por desprestigiar a la iglesia con su divorcio.
La decisión de los diáconos se tomó después de que Durán leyó una declaración en el templo en la descartó su renuncia, argumentando que “quien me nombró acá como obispo a cargo de la congregación no fueron los hombres si no que fue Dios todo poderoso”.
Esto provocó la ira de cientos de seguidores de la catedral, metodistas pentecostales, quienes protestaron con carteles y gritos en el templo para exigir la renuncia de Durán. En la mañana del sábado ya lo había hecho su hijo, el diputado Eduardo Durán Salinas, pero en protesta contra su padre.
Tras conocerse la negativa de Durán Castro a renunciar, los diáconos se reunieron y decidieron por mayoría iniciar el proceso de destitución del obispo. Además, anunciaron que la administración de la catedral quedará en manos de la junta Oficial de Diáconos.
En una declaración leída por el diácono Pedro Chacón afirmaron que “el actuar del pastor Eduardo Durán Castro está alejado de los valores y principios que un pastor debe tener según las sagradas escrituras”.
En ese sentido, señalaron que “ha incurrido en falta de temor de Dios al utilizar los diezmos del señor para mantener una vida de lujo personal sin ninguna consideración a la hermandad humilde y sencilla”.
Además, aseguraron que el actuar de Durán Castro ha provocado un desprestigio a la iglesia y a la pastora Raquel Salinas, su actual esposa, de quien quiere divorciarse para contraer un nuevo matrimonio.
Por lo anterior, enfatizaron que “rechazamos las acciones del pastor Eduardo Durán Castro que han provocado un grave daño a nuestra querida Iglesia Jotabeche, al punto que muchas familias por este escándalo no han querido seguir en el evangelio”.
Finalmente, según reveló Chacón, los diáconos le pidieron a Durán que cambiara su comportamiento, pero nunca aceptó consejos y que, al contrario, reaccionó con “ira, enojo y soberbia”.
La decisión de los diáconos se tomó después de que Durán leyó una declaración en el templo en la descartó su renuncia, argumentando que “quien me nombró acá como obispo a cargo de la congregación no fueron los hombres si no que fue Dios todo poderoso”.
Esto provocó la ira de cientos de seguidores de la catedral, metodistas pentecostales, quienes protestaron con carteles y gritos en el templo para exigir la renuncia de Durán. En la mañana del sábado ya lo había hecho su hijo, el diputado Eduardo Durán Salinas, pero en protesta contra su padre.
Tras conocerse la negativa de Durán Castro a renunciar, los diáconos se reunieron y decidieron por mayoría iniciar el proceso de destitución del obispo. Además, anunciaron que la administración de la catedral quedará en manos de la junta Oficial de Diáconos.
En una declaración leída por el diácono Pedro Chacón afirmaron que “el actuar del pastor Eduardo Durán Castro está alejado de los valores y principios que un pastor debe tener según las sagradas escrituras”.
En ese sentido, señalaron que “ha incurrido en falta de temor de Dios al utilizar los diezmos del señor para mantener una vida de lujo personal sin ninguna consideración a la hermandad humilde y sencilla”.
Además, aseguraron que el actuar de Durán Castro ha provocado un desprestigio a la iglesia y a la pastora Raquel Salinas, su actual esposa, de quien quiere divorciarse para contraer un nuevo matrimonio.
Por lo anterior, enfatizaron que “rechazamos las acciones del pastor Eduardo Durán Castro que han provocado un grave daño a nuestra querida Iglesia Jotabeche, al punto que muchas familias por este escándalo no han querido seguir en el evangelio”.
Finalmente, según reveló Chacón, los diáconos le pidieron a Durán que cambiara su comportamiento, pero nunca aceptó consejos y que, al contrario, reaccionó con “ira, enojo y soberbia”.
