Carabineros detuvo a un total de 23 personas en las últimas horas en tres procedimientos policiales por fiestas clandestinas en la región Metropolitana. En uno de ellos hubo lanzamiento de objetos contundentes a los funcionarios.

En el primer operativo realizado en la comuna de Quilicura, los efectivos de Carabineros fiscalizaron en calle Ismael Briceño un local de venta y consumo clandestino de bebidas alcohólicas, donde fueron detenidas siete personas.

La policía uniformada incautó 64 botellas de cerveza, mientras que los detenidos, todos de nacionalidad haitiana, fueron puestos a disposición de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte por no respetar la cuarentena que rige durante el fin de semana en esa comuna, que se encuentra en fase 2 de transición.

Otra situación similar se registró también en la tarde del sábado en la comuna de Recoleta, donde los efectivos policiales fiscalizaron otro local de venta clandestina de alcoholes que además registraba ruidos molestos por el alto volumen de la música.

En el lugar fueron detenidas 15 personas, todas de nacionalidad peruana, incluida la dueña del recinto. Además, se incautaron 46 botellas de cerveza. Todos fueron puestos a disposición de la fiscalía por no respetar las disposiciones de la autoridad sanitaria.

En un tercer procedimiento, realizado en la madrugada de este domingo en Colina, los efectivos policiales ingresaron a un campamento donde se estaba efectuando una fiesta con consumo de alcohol. Ante la presencia de Carabineros, los participantes se dieron a la fuga.

Los funcionarios detuvieron a la organizadora de la fiesta, una mujer dominicana, e incautó 498 botellas de cerveza, cinco botellas de whisky, 33 latas de bebida energéticas, dos parlantes musicales y un juego de luces.

En el lugar, desconocidos arrojaron elementos contundentes contra los efectivos policiales, pero no se registraron lesionados.