La integración migratoria a través del deporte cada año pasa a convertirse en una pieza más importante que en el anterior para el desarrollo de capital deportivo y cultural de nuestro país. Es importante destacar este punto ya que el deporte ha sido el principal promotor de la tolerancia e inclusión racial.
Una anécdota a recordar en este día es aquella Sudáfrica de Mandela dividida política y racialmente, que en el ‘85, tras el histórico partido de rugby conocido como “el juego que salvó a una nación”, negros y blancos se mezclaron en abrazos para celebrar una compartida felicidad:ver a su equipo triunfar.
No está demás recordar que el chileno es un apasionado del fútbol, del tenis, del básquetbol, y muchos otros deportes que en ningún caso se originaron en Chile. Hoy existen ligas populares de fútbol americano y de béisbol que poseen una alta convocatoria, que así como el fútbol, fueron traídos por los futuros chilenos, o dicho de otra forma, por los actuales inmigrantes. Es por esto mismo que resulta ser un día especial donde podemos agradecer y vivir en comunidad la alegría de poder disfrutar de espectáculos deportivos que unen familias, amistades e incluso países.