Para muchos, el duelo de mañana de la Selección Chilena ante Burkina Faso será un partido de poca exigencia de cara a la Copa Confederaciones, considerando el nivel de los rivales en el certamen internacional, en el que participarán potencias como Alemania y Portugal.
Esto es en parte por lo poco conocida que es la selección africana en la historia reciente del fútbol (vienen de salir terceros en la Copa Africana de Naciones), pero más aún si se considera que los “Potros” ni siquiera llegan a nuestro país con equipo titular sino que más bien con un combinado alternativo.
De todas formas, esta no sería la primera vez que la Roja se mide ante un equipo de poca relevancia en el fútbol mundial, ya que en la historia reciente hemos presenciado varios amistosos de similar categoría.
El año 2010, la selección que en ese entonces era dirigida por Marcelo Bielsa se midió ante Zambia en Calama, como preparación para la Copa del Mundo de Sudáfrica. El resultado final fue un abultado 3-0 para los pupilos del “Loco”. Un par de días antes el rival había sido Trinidad y Tobago, a quien el combinado nacional derrotó por 2-0 en Iquique.
Ese mismo año, en lo que sería uno de los últimos partidos del rosarino a cargo de la Roja, el rival fue Omán, con victoria para los chilenos por la cuenta mínima en un duelo disputado en Mascate, la capital del sultanato.
Al año siguiente, ya con Claudio Borghi como nuevo estratega, la selección nacional se midió ante Estonia en Santiago. Poca resistencia presentaron los europeos, quienes cayeron por un contundente 4-0.
Dos años después, bajo el mando de Jorge Sampaoli, la Roja se midió ante Irak en Copenhague. 6-0 fue el resultado final a favor de los dirigidos por el casildense, quienes no tuvieron mayores complicaciones para golear a los asiáticos.
Así, difícilmente el duelo de mañana quede en la historia dentro de los grandes compromisos de nuestra selección, pero sí de seguro se sumará al cada vez más largo listado de rivales poco convencionales.
Esto es en parte por lo poco conocida que es la selección africana en la historia reciente del fútbol (vienen de salir terceros en la Copa Africana de Naciones), pero más aún si se considera que los “Potros” ni siquiera llegan a nuestro país con equipo titular sino que más bien con un combinado alternativo.
De todas formas, esta no sería la primera vez que la Roja se mide ante un equipo de poca relevancia en el fútbol mundial, ya que en la historia reciente hemos presenciado varios amistosos de similar categoría.
El año 2010, la selección que en ese entonces era dirigida por Marcelo Bielsa se midió ante Zambia en Calama, como preparación para la Copa del Mundo de Sudáfrica. El resultado final fue un abultado 3-0 para los pupilos del “Loco”. Un par de días antes el rival había sido Trinidad y Tobago, a quien el combinado nacional derrotó por 2-0 en Iquique.
Ese mismo año, en lo que sería uno de los últimos partidos del rosarino a cargo de la Roja, el rival fue Omán, con victoria para los chilenos por la cuenta mínima en un duelo disputado en Mascate, la capital del sultanato.
Al año siguiente, ya con Claudio Borghi como nuevo estratega, la selección nacional se midió ante Estonia en Santiago. Poca resistencia presentaron los europeos, quienes cayeron por un contundente 4-0.
Dos años después, bajo el mando de Jorge Sampaoli, la Roja se midió ante Irak en Copenhague. 6-0 fue el resultado final a favor de los dirigidos por el casildense, quienes no tuvieron mayores complicaciones para golear a los asiáticos.
Así, difícilmente el duelo de mañana quede en la historia dentro de los grandes compromisos de nuestra selección, pero sí de seguro se sumará al cada vez más largo listado de rivales poco convencionales.
