El constituyente Agustín Squella aseguró que la Convención Constitucional “se acaba” si sus integrantes definen modificar el quórum de dos tercios para la toma de decisiones, debido a que esta instancia perdería su legitimidad a la hora de cambiar este tipo de normas.
En conversación con Radio Cooperativa, Squella dijo que “no sé cómo diablos estamos todavía discutiendo los dos tercios (…) de una vez por todas los convencionales deberíamos admitir un hecho objetivo, que por lo demás conocíamos cuando competimos para ser constituyentes y cuando se instaló la Convención, hay un quórum de dos tercios para aprobar futuras normas constitucionales y para aprobar normas de votación”, manifestó el abogado y Premio Nacional de Humanidades.
“Ese quórum hay que respetarlo, nos guste o no. A mí nunca, y tengo que confesarlo y lo dije en mi campaña, nunca me gustó el quórum de dos tercios, lo encontraba y lo encuentro alto, sin embargo estoy por respetarlo, porque es una norma previa al trabajo constitucional”, afirmó.
“Yo espero que sinceremos esta semana de una vez por todas esa cuestión y que la minoría que está por atribuirle a la Convención la facultad de cambiar los dos tercios, de una vez por todas declare que esa es su posición y si el pleno tiene que votar, aunque es increíble”, agregó.
En esa línea, Squella, señaló que la aprobación de un cambio en el quórum, derivará en que “se acabe la Convención”.
“¿Cómo una Convención que va a establecer reglas constitucionales a futuro para el país va a partir incumpliendo ella una norma constitucional que la rige? Eso sería cuando menos un mal ejemplo”, insistió.
“La Convención quedaría, por decirlo en términos futbolísticos, a contrapié o mucho más que a contrapié, porque perdería a los ojos de la ciudadanía la legitimidad que la ciudadanía le reconoce”, afirmó el abogado.
“Hay un peligro muy grande si eso ocurriera, pero yo no solo tengo la esperanza, tengo la seguridad de que eso no va a ocurrir”, cerró.
CASO ROJAS VADE
El convencional también tuvo palabras para la situación de su par en la Convención, Rodrigo Rojas Vade, quien reconoció no tener cáncer, a lo que indicó que “la mesa ha estado débil y sigue estando débil, a mi juicio (…) el hecho de que Rodrigo Rojas haya renunciado a una vicepresidencia, pero no haya renunciado a la Convención misma, es otra expresión de imprecisión, de ambigüedad, ahora no de parte de la mesa, sino de parte del propio constituyente”.
“Si Rodrigo Rojas hubiera renunciado a la Convención no sabríamos muy bien que hacer con su renuncia desde el punto de vista jurídico, pero desde el punto de vista político esa renuncia habría, de alguna manera, cerrado la situación y ese efecto político, mientras él no renuncie, no se produce”, afirmó.