La nave fue mostrada este jueves en la mañana por el director nacional de Conaf, Aarón Cavieres, en el hangar de la empresa de servicios aéreos Santiago FBO, en el aeropuerto internacional de Pudahuel, donde se le está instalando el tanque ventral.
El Sikorsky S-64 carga 10.000 litros de agua, lleva dos pilotos y un observador en cabina trasera, y tiene una autonomía de vuelo de 2,5 horas. El tanque ventral se llena en 45 segundos en cualquier fuente de agua, y puede volar a una velocidad crucero de 170 kilómetros por hora.
El helicóptero se dirigirá a la región del Biobío, desde donde operará durante la segunda parte de la temporada de incendios forestales, que se extiende hasta mayo. La nave también opera en EE.UU., Italia, Australia, Grecia, Canadá, México y Corea del Sur.
El director de Conaf explicó que esta segunda etapa se presenta bastante compleja por la falta de lluvias en la zona central del país, situación que se ha prolongado por cerca de 100 días.
Hasta la fecha se han producido 3.934 siniestros, casi similar a los registrados a igual fecha de 2017, con 3.938, pero con sólo un 4% de superficie afectada en comparación con el período anterior, cuando la zona central fue arrasada por una tormenta de fuego.