Colombia buscaba este domingo a los responsables del atentado de la víspera en un centro comercial de Bogotá que dejó tres muertos y nueve heridos, incluida una ciudadana francesa, a dos días del fin del desarme de las FARC, principal guerrilla del país.
“Este domingo realizaremos Consejo de Seguridad para evaluar pasos adicionales que permitan garantizar la tranquilidad de Bogotá”, dijo el presidente Juan Manuel Santos desde el centro comercial Andino, ubicado en la Zona Rosa de la capital, muy frecuentada por extranjeros.
Por ahora las autoridades no tienen indicios sobre quienes fueron los responsables del ataque y tampoco ha sido reivindicado por ningún grupo.
Un artefacto explotó detrás de un inodoro en el baño de mujeres de la segunda planta del centro comercial, según las primeras pesquisas.
Una francesa de 23 años y dos colombianas (de 31 y 41) fallecieron debido a las lesiones. En tanto, entre los nueve heridos se reportó a otra ciudadana francesa y a una mujer en “estado crítico”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, condenó hoy “firmemente” el atentado terrorista en Bogotá. “Condenamos firmemente atentado terrorista en Bogotá que costó la vida de tres mujeres y varias heridos”, afirmó el canciller chileno a través de su cuenta Twitter. “Solidaridad de Chile al Gobierno y familia víctimas”, añadió el mensaje del ministro Muñoz.
Por su parte, “Tristeza y condolencias a sus familiares”, escribió en Twitter el presidente de Francia, Emmanuel Macron, sobre la joven que habría llegado a Bogotá para hacer un voluntariado en un colegio de un sector popular.
La sección antiterrorista de la Fiscalía de París inició una investigación sobre la muerte de la joven. Estas investigaciones son un procedimiento clásico en el caso de muertes en actos terroristas de ciudadanos franceses en el exterior.
Por su lado, el gobierno español emitió un comunicado de condena al atentado y ofreció “toda su colaboración a las autoridades colombianas para que los responsables sean detenidos”.
En las últimas dos semanas, la guerrilla consignó el 60% de su arsenal a la misión de Naciones Unidas en Colombia, a cargo de este proceso. Es un paso clave para que unos 7.000 combatientes inicien su transición a la vida civil.
¿Pero el atentado apunta a dañar el proceso de paz en Colombia?
“Los que quieren aguar la fiesta de la paz no van a tener éxito, y si esto es una manifestación en ese sentido tengan la absoluta seguridad que a esos enemigos de la paz los vamos a perseguir sin tregua ni cuartel”, advirtió Santos.
El analista Víctor De Currea-Lugo consideró poco probable que el ataque proviniera de las guerrillas de las FARC o del ELN, única guerrilla activa del país, e indicó que hay sectores que buscan sabotear el proceso de paz.
“Hay unos grupos armados de extrema derecha de corte paramilitar que son responsables del asesinato de líderes sociales y de acciones contrarias a la paz”, afirmó el profesor de la Universidad Nacional a la AFP.
Sin embargo, De Currea-Lugo descartó que peligre el proceso de paz “que tiene una dinámica propia y el apoyo de un sector de la sociedad que se mostró dolido” cuando se trató “de usar políticamente el atentado”.
Tanto el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño (Timochenko), como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) condenaron el atentado y advirtieron sobre aquellos que quieren “cerrar los caminos de la paz” o “hacer trizas los procesos” de negociación.
El gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con unos 1.500 combatientes según cálculos oficiales, instalaron diálogos de paz en febrero, sin que se acordara un cese al fuego.
Horas después de la explosión, bares, restaurantes y discotecas de los alrededores del Andino estaban abiertos, aunque en la zona había menos movimiento del habitual.
Pese al pánico en la población, Santos pidió a los colombianos celebrar con “normalidad” el Día del Padre este domingo y anunció que mantendrá su viaje del 20 al 23 de junio a Portugal y Francia, donde se reunirá con Macron.
“El terrorismo lo que que quiere es cambiar la agenda al país, empezando por el presidente; la respuesta por este tipo de ataque es la normalidad”, afirmó Santos.
Este es el segundo atentado de gravedad este año en Bogotá. El 19 de febrero, una explosión cerca de la Plaza de Toros dejó un policía muerto y 23 uniformados y dos civiles heridos, en un hecho que se atribuyó al ELN.
“Este domingo realizaremos Consejo de Seguridad para evaluar pasos adicionales que permitan garantizar la tranquilidad de Bogotá”, dijo el presidente Juan Manuel Santos desde el centro comercial Andino, ubicado en la Zona Rosa de la capital, muy frecuentada por extranjeros.
Por ahora las autoridades no tienen indicios sobre quienes fueron los responsables del ataque y tampoco ha sido reivindicado por ningún grupo.
Un artefacto explotó detrás de un inodoro en el baño de mujeres de la segunda planta del centro comercial, según las primeras pesquisas.
Una francesa de 23 años y dos colombianas (de 31 y 41) fallecieron debido a las lesiones. En tanto, entre los nueve heridos se reportó a otra ciudadana francesa y a una mujer en “estado crítico”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, condenó hoy “firmemente” el atentado terrorista en Bogotá. “Condenamos firmemente atentado terrorista en Bogotá que costó la vida de tres mujeres y varias heridos”, afirmó el canciller chileno a través de su cuenta Twitter. “Solidaridad de Chile al Gobierno y familia víctimas”, añadió el mensaje del ministro Muñoz.
Por su parte, “Tristeza y condolencias a sus familiares”, escribió en Twitter el presidente de Francia, Emmanuel Macron, sobre la joven que habría llegado a Bogotá para hacer un voluntariado en un colegio de un sector popular.
La sección antiterrorista de la Fiscalía de París inició una investigación sobre la muerte de la joven. Estas investigaciones son un procedimiento clásico en el caso de muertes en actos terroristas de ciudadanos franceses en el exterior.
Por su lado, el gobierno español emitió un comunicado de condena al atentado y ofreció “toda su colaboración a las autoridades colombianas para que los responsables sean detenidos”.
¿Dañar el proceso de paz?
El atentado ocurre cuando las FARC iniciarán este martes la tercera y última fase de la dejación de armas, como parte de un histórico pacto de paz firmado en noviembre con el gobierno, con miras a terminar medio siglo de una conflagración interna, que deja unos 260.000 muertos y 60.000 desaparecidos.En las últimas dos semanas, la guerrilla consignó el 60% de su arsenal a la misión de Naciones Unidas en Colombia, a cargo de este proceso. Es un paso clave para que unos 7.000 combatientes inicien su transición a la vida civil.
¿Pero el atentado apunta a dañar el proceso de paz en Colombia?
“Los que quieren aguar la fiesta de la paz no van a tener éxito, y si esto es una manifestación en ese sentido tengan la absoluta seguridad que a esos enemigos de la paz los vamos a perseguir sin tregua ni cuartel”, advirtió Santos.
El analista Víctor De Currea-Lugo consideró poco probable que el ataque proviniera de las guerrillas de las FARC o del ELN, única guerrilla activa del país, e indicó que hay sectores que buscan sabotear el proceso de paz.
“Hay unos grupos armados de extrema derecha de corte paramilitar que son responsables del asesinato de líderes sociales y de acciones contrarias a la paz”, afirmó el profesor de la Universidad Nacional a la AFP.
Sin embargo, De Currea-Lugo descartó que peligre el proceso de paz “que tiene una dinámica propia y el apoyo de un sector de la sociedad que se mostró dolido” cuando se trató “de usar políticamente el atentado”.
Tanto el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño (Timochenko), como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) condenaron el atentado y advirtieron sobre aquellos que quieren “cerrar los caminos de la paz” o “hacer trizas los procesos” de negociación.
El gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con unos 1.500 combatientes según cálculos oficiales, instalaron diálogos de paz en febrero, sin que se acordara un cese al fuego.
Volver a la normalidad
El centro comercial reabrió sus puertas la mañana del domingo sin que se observaran medidas de seguridad adicionales, según constató la AFP.Horas después de la explosión, bares, restaurantes y discotecas de los alrededores del Andino estaban abiertos, aunque en la zona había menos movimiento del habitual.
Pese al pánico en la población, Santos pidió a los colombianos celebrar con “normalidad” el Día del Padre este domingo y anunció que mantendrá su viaje del 20 al 23 de junio a Portugal y Francia, donde se reunirá con Macron.
“El terrorismo lo que que quiere es cambiar la agenda al país, empezando por el presidente; la respuesta por este tipo de ataque es la normalidad”, afirmó Santos.
Este es el segundo atentado de gravedad este año en Bogotá. El 19 de febrero, una explosión cerca de la Plaza de Toros dejó un policía muerto y 23 uniformados y dos civiles heridos, en un hecho que se atribuyó al ELN.