El Colegio Cumbres, que es propiedad de los Legionarios de Cristo, emitió un comunicado asegurando “medidas concretas” para enfrentar las denuncias que interpuso una exalumna por “abuso sexual” y “tortura” de parte de miembros del establecimiento.
La mujer de 32 años estudió en dicho establecimiento desde 1996 hasta 2007, luego ingresó a las “consagradas”, una comunidad dentro de la misma institución en la que mujeres hacen votos de castidad y obediencia.
En ese marco, la demandante acusó que, durante esos periodos, experimentó diversos tipos de abuso sexual, y sostiene que las autoridades de la congregación estaban al tanto, pero nunca tomaron medidas y fueron cómplices al encubrirlos.
“Fui víctima de graves abusos de conciencia y de poder, como también de diversos hechos de connotación sexual e incluso de tortura por parte de distintos miembros de los Legionarios de Cristo y de las Consagradas”, afirma la demanda.
En ese marco, el colegio de Las Condes se refirió al tema a través de una misiva firmada por su directora, Beatriz Moreno, donde reconocen que esta situación es “una fuente de gran dolor, confusión y desconcierto”.
“Reafirmamos nuestro compromiso con la verdad, el bien y el cuidado de nuestros alumnos (…). Estos son los momentos para fortalecer nuestra renovada cultura institucional inspirada en los principios de nuestro proyecto educativo”, agregaron.
Respecto a la denuncia han tomado “medidas concretas”, como reuniones con padres de familia, funcionarios del colegio y algunos exalumnos. También anunciaron que los sacerdotes implicados serán separados de sus funciones.
“La situación nos ha llevado a tomar medidas prudenciales en relación a la presencia de los sacerdotes implicados en la demanda, que como les informamos en las reuniones por Ciclo, este tiempo estarán separados de sus funciones en todo lo que implica la vida escolar“, cerró Moreno.