China realizó pruebas de detección del nuevo coronavirus a más de 250.000 personas después de que un pequeño número de casos fueran detectados en la ciudad sureña de Chengdu.
Una pareja de ancianos fue diagnosticada como caso confirmado el lunes y las autoridades han estado rastreando sus contactos y analizando muestras de alimentos.
Los responsables sanitarios locales dijeron que el virus fue detectado en alimentos almacenados en su heladera y en una tabla de cortar dentro del departamento.
Hasta el martes, 255.200 residentes en la ciudad habían sido sometidos a pruebas de Covid-19, informó la comisión municipal de salud, con seis casos confirmados y un paciente asintomático.
Las escuelas y los jardines de infancia del distrito de Pidu, donde surgieron los casos, han cerrado, según las autoridades locales, con estudiantes y maestros en cuarentena y pruebas para detectar el virus.
Las imágenes de la televisión estatal mostraban a personas en un parque haciendo cola para realizar las pruebas, llevadas a cabo por funcionarios de salud vestidos con trajes de alta protección.
La Organización Mundial de la Salud afirma que, actualmente, no hay pruebas de que las personas puedan atrapar el Covid-19 vía alimentos o envoltorios.