El Consejo de Defensa del Estado (CDE) se querelló por cuaidelito de homicidio contra dos cuidadoras –y quienes resulten responsables- por la muerte de Lissette (11) que estaba bajo el cuidado del Estado en el centro Cread Galvarino.
La acción penal está dirigida contra Thiare Oyarce y Conne Fritz, quienes ya fueron imputadas por el fiscal regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, por el delito de apremios ilegítimos con resultado de muerte, pero para el CDE esto constituye un cuasidelito de homicidio.
La acción legal indicó que “poco antes de las 20:00 horas y ante la negativa de las educadoras de salir de la cabaña que le correspondía en el Centro de internación, experimenta una crisis más severa. Ante ello, las dos funcionarias a cargo, Thiare Oyarce García y Conne Fritz Castillo, inician un supuesto procedimiento de contención”.
“La niña grita que la suelten, en medio de gran agitación física, y amenaza con orinarse, lo que efectivamente hace. En ese instante las funcionarias perciben que la niña se queda quieta, e intentan que se incorpore, pero la niña no reacciona, Thiare Oyarce llama por radio a los demás funcionarios, acudiendo entre otros la técnico en enfermería de turno doña Lorena Miranda Yañez, quien constata que la víctima está inconsciente, cianótica, saturando 67% tomado con oxímetro, ojos desorbitados y pulso de 120 por minuto”, afirmó.
Los miembros del organismo llegaron a esta conclusión, ya que se apegaron al artículo 490 del Código Penal que señala que “por imprudencia temeraria ejecutare un hecha que, si mediara malicia, constituiría un crimen o simple delito contra las personas”.
La acción penal está dirigida contra Thiare Oyarce y Conne Fritz, quienes ya fueron imputadas por el fiscal regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, por el delito de apremios ilegítimos con resultado de muerte, pero para el CDE esto constituye un cuasidelito de homicidio.
La acción legal indicó que “poco antes de las 20:00 horas y ante la negativa de las educadoras de salir de la cabaña que le correspondía en el Centro de internación, experimenta una crisis más severa. Ante ello, las dos funcionarias a cargo, Thiare Oyarce García y Conne Fritz Castillo, inician un supuesto procedimiento de contención”.
“La niña grita que la suelten, en medio de gran agitación física, y amenaza con orinarse, lo que efectivamente hace. En ese instante las funcionarias perciben que la niña se queda quieta, e intentan que se incorpore, pero la niña no reacciona, Thiare Oyarce llama por radio a los demás funcionarios, acudiendo entre otros la técnico en enfermería de turno doña Lorena Miranda Yañez, quien constata que la víctima está inconsciente, cianótica, saturando 67% tomado con oxímetro, ojos desorbitados y pulso de 120 por minuto”, afirmó.
Los miembros del organismo llegaron a esta conclusión, ya que se apegaron al artículo 490 del Código Penal que señala que “por imprudencia temeraria ejecutare un hecha que, si mediara malicia, constituiría un crimen o simple delito contra las personas”.
