En su edición de hoy, La Tercera informa que si bien la Sala Penal determinó devolver la totalidad de los dineros contenidos en las cuentas que hasta ahora estaban congeladas, en los próximos días los ministros se reunirán para revisar si la totalidad de los inmuebles embargados fueron adquiridos directamente con dineros de la malversación o existen algunos que hayan sido comprados con otros fondos.
Una vez que se concrete el traspaso de las propiedades al Fisco, éstas serán rematadas. Esto marca la parte final de un caso que comenzó a tramitarse en el 2004, después de un largo proceso donde se revelaron las cuentas secretas que mantenía Pinochet en el extranjero.
Un informe de la Universidad de Chile cifró en 21 millones de dólares el patrimonio, de los cuales 17 millones de dólares no se pudo establecer cuál fue su origen. El fallo de la Corte Suprema finalmente que los bienes adquiridos en forma ilícita debían volver al Estado.