Por esta razón, es fundamental la prevención. Se recomienda a todos los hombres mayores de 40 evaluarse anualmente con un urólogo, y realizarse un examen de sangre que mida los niveles de antígeno prostático y un examen rectal.
En caso de que los niveles de antígeno prostático se encuentren elevados y que el especialista palpe algún nódulo, se requiere una resonancia magnética y luego una biopsia de la próstata para determinar si existe un tumor maligno.
DIAGNÓSTICO OPORTUNO
La técnica tradicional, que requiere 2 ó 3 muestras por punción en seis sectores distintos –en forma aleatoria o en los sitios donde más frecuentemente se encuentran tumores–, tiene una tasa de detección de 20%. Esto implica mayor probabilidad de repetición de la biopsia al año siguiente si el antígeno prostático sigue elevándose, lo que genera incertidumbre e incomodidad en el paciente, además de lentitud en el diagnóstico.“El gran problema es su baja fiabilidad, además de ser muy invasiva, porque es necesario hacer reiteradas biopsias debido a la probabilidad de encontrar, casi al azar, con un posible tumor”, explica Rubén Olivares, urólogo de Clínica Santa María.
El centro médico cuenta en la actualidad con el equipo Trinity® de Koelis. “Esta tecnología tiene un software que fusiona en 3D la imagen introducida de la resonancia nuclear magnética multiparamétrica –que delimita el área del posible tumor– tomada previamente con las imágenes de la ecografía que se realiza en tiempo real. De esta forma, se calca la lesión sospechosa de la resonancia en la ecografía, permitiendo mayor exactitud al momento de pinchar el órgano para extraer la muestra”, explica Olivares.
“Está demostrado que esto aumenta la tasa de detección global de cánceres de próstata, sobre todo en tumores agresivos y de gran volumen. Tiene un 97% de exactitud con el nódulo que mostró la resonancia, al momento de tomar las muestras”, remarca.
BENEFICIOS
La biopsia es guiada en 3D, lo que aumenta la exactitud, mejorando el diagnóstico de cáncer.Al ser una fusión elástica y no rígida como en el método tradicional, es capaz de hacer coincidir dos imágenes supliendo el cambio de posición del paciente entre la resonancia y la ecografía y la presión que se ejerce sobre la próstata. Esto otras palabras, elimina cualquier distorsión.
Las otras técnicas por fusión disponibles no son elásticas, por lo que no aumenta significativamente la eficacia en la detección, a diferencia del Trinity®.
Permite realizar disparos virtuales, para asegurarse de tener una máxima precisión antes del pinchazo real. Con eso se reduce la cantidad de pinchazos y las complicaciones para el paciente.
Graba la ubicación de los disparos, lo que es útil para nuevas sesiones de biopsia o la planificación de un tratamiento.
Gracias a la fusión elástica entre series, dos biopsias consecutivas pueden ser pareadas. De esta forma, se puede mantener un historial del paciente y hacer un seguimiento de la evolución en el tiempo de los nódulos detectados.
Es compatible con Focal One®, procedimiento mínimamente invasivo que, con ondas de ultrasonido de alta frecuencia, elimina los tumores localizados con gran precisión y sin dañar áreas sanas de la próstata, lo que disminuye la probabilidad de quedar con secuelas como incontinencia urinaria y disfunción eréctil.