Tras un amplio debate a través de dos sesiones, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de reforma constitucional que promueve la igualdad de derechos y dignidad entre mujeres y hombres. La iniciativa pasó al Senado.
La propuesta, ingresada a trámite legislativo el 29 de mayo, corresponde a una iniciativa de la agenda de Equidad de Género del gobierno de Sebastián Piñera, que busca impulsar medidas para avanzar hacia una sociedad que respete las naturales y complementarias diferencias entre hombres y mujeres y que reconozca los mismos derechos, deberes, dignidades y oportunidades.
La propuesta original constaba de un artículo único que agregaba en el Capítulo I de la Constitución Políticas, de Bases de la Institucionalidad, el deber del Estado de promover la igualdad de derechos y dignidad entre mujeres y hombres, evitando toda forma de violencia, abuso o discriminación arbitraria.
Por su paso por la Comisión de Constitución, el texto fue modificado para terminar definiendo que “es deber del Estado respetar y promover la igualdad de dignidad y derechos entre mujeres y hombres, prohibiéndose toda forma de violencia, abuso o discriminación arbitraria“. Esta norma fue aprobada por 146 votos a favor y uno en contra.
El texto plantado por la citada Comisión incluía también un amplio listado de modificaciones al Capítulo III, relativo a los Derechos y Deberes Constitucionales; así como a los Capítulos V y VI, relativos al Congreso Nacional y al Poder Judicial, respectivamente.
Prácticamente todos esos cambios -así como las indicaciones renovadas en la Sala- fueron rechazados por no alcanzarse el quórum necesario, esto es, un mínimo de 103 votos favorables para alterar el Capítulo III, y un piso de 93 votos a favor para los capítulos referentes al Poder Judicial y Congreso Nacional.
Una excepción lo constituyó una modificación al Capítulo III, relativo al derecho de igualdad ante la ley. En este ámbito se adiciona, tras la frase “Hombres y mujeres son iguales ante la ley”, una norma que define que será “deber del Estado evitar e impedir toda forma de violencia contra la mujer, abuso o discriminación arbitraria. Para ello, garantizará la eliminación de las desventajas existentes, removiendo los obstáculos que la impidan o dificulten, facilitando la participación de todas las personas en la vida política, económica, social y cultural”.
Por su parte, la diputada Karol Cariola (PC), mostró su molestia por el resultado de una reforma que catalogó como “mediocre“, ya que “no garantiza efectos reales en el derecho de las mujeres a una igualdad”, según consignó Cooperativa.cl.
“Nos parece que es grave. Cuando nosotros decimos que hombres y mujeres tienen el mismo derecho a tener el mismo salario lo decimos en serio y nos parece terrible, mentiroso y cobarde de parte de los parlamentarios de Chile Vamos haber rechazado” esta medida, sentenció la diputada.
La propuesta, ingresada a trámite legislativo el 29 de mayo, corresponde a una iniciativa de la agenda de Equidad de Género del gobierno de Sebastián Piñera, que busca impulsar medidas para avanzar hacia una sociedad que respete las naturales y complementarias diferencias entre hombres y mujeres y que reconozca los mismos derechos, deberes, dignidades y oportunidades.
La propuesta original constaba de un artículo único que agregaba en el Capítulo I de la Constitución Políticas, de Bases de la Institucionalidad, el deber del Estado de promover la igualdad de derechos y dignidad entre mujeres y hombres, evitando toda forma de violencia, abuso o discriminación arbitraria.
Por su paso por la Comisión de Constitución, el texto fue modificado para terminar definiendo que “es deber del Estado respetar y promover la igualdad de dignidad y derechos entre mujeres y hombres, prohibiéndose toda forma de violencia, abuso o discriminación arbitraria“. Esta norma fue aprobada por 146 votos a favor y uno en contra.
El texto plantado por la citada Comisión incluía también un amplio listado de modificaciones al Capítulo III, relativo a los Derechos y Deberes Constitucionales; así como a los Capítulos V y VI, relativos al Congreso Nacional y al Poder Judicial, respectivamente.
Prácticamente todos esos cambios -así como las indicaciones renovadas en la Sala- fueron rechazados por no alcanzarse el quórum necesario, esto es, un mínimo de 103 votos favorables para alterar el Capítulo III, y un piso de 93 votos a favor para los capítulos referentes al Poder Judicial y Congreso Nacional.
Una excepción lo constituyó una modificación al Capítulo III, relativo al derecho de igualdad ante la ley. En este ámbito se adiciona, tras la frase “Hombres y mujeres son iguales ante la ley”, una norma que define que será “deber del Estado evitar e impedir toda forma de violencia contra la mujer, abuso o discriminación arbitraria. Para ello, garantizará la eliminación de las desventajas existentes, removiendo los obstáculos que la impidan o dificulten, facilitando la participación de todas las personas en la vida política, económica, social y cultural”.
Por su parte, la diputada Karol Cariola (PC), mostró su molestia por el resultado de una reforma que catalogó como “mediocre“, ya que “no garantiza efectos reales en el derecho de las mujeres a una igualdad”, según consignó Cooperativa.cl.
“Nos parece que es grave. Cuando nosotros decimos que hombres y mujeres tienen el mismo derecho a tener el mismo salario lo decimos en serio y nos parece terrible, mentiroso y cobarde de parte de los parlamentarios de Chile Vamos haber rechazado” esta medida, sentenció la diputada.