El contralor general de la República, Jorge Bermúdez, declaró vacante el puesto de subcontralor, debido a que la titular Dorothy Pérez se negó a renunciar el lunes pasado cuando le solicitó dejar el cargo que ocupa desde el 12 de septiembre de 2016.
Según informa este jueves La Tercera, Bermúdez informó de su decisión a los trabajadores del órgano contralor a través de un correo electrónico, en el que además agradece a Pérez por el servicio prestado “en las diversas labores que ha servido como funcionaria de nuestra Contraloría”.
Esta medida de Bermúdez se produce tras una serie de desencuentros entre ambos, los que se habrían acrecentado luego de que se conociera que el fiscal Eugenio Campos, quien indaga el fraude en Carabineros, citaría a la abogada de la U. de Chile para que declarara en la causa.
Ambos se conocieron en 2007, cuando Dorothy Pérez trabajaba en la Contraloría Regional de Valparaíso y Bermúdez era profesor de Derecho de la U. Católica de Valparaíso. En ese periodo, la abogada trabajaba en la Unidad de Personal de la Administración del Estado y a fines de ese año fue nombrada contralora regional de la zona, cargo que mantuvo hasta 2010.
Pérez había tenido una ascendente carrera al interior de la institución desde su ingreso en 2004, como abogado de la División de Vivienda, Urbanismo, Obras Públicas y Transportes.
Cuando Ramiro Mendoza fue nombrado contralor, fue ascendida a subjefa de Auditoría Administrativa en Santiago, lugar en el que se mantuvo hasta 2014.
En marzo de ese año, con la llegada del segundo gobierno de Bachelet, fue reclutada por Nicolás Eyzaguirre para asumir como jefa de la División Jurídica del Mineduc, donde trabajó hasta enero de 2016, cuando volvió a la Contraloría como jefa de gabinete de Bermúdez.
Para la elección del sucesor de Mendoza, a fines de 2015, dos personas que trabajaron con la subcontralora afirman que “movió todos los hilos” para que el elegido fuera Bermúdez. “Ella encontraba que era la mejor carta por sus características humanas y de trabajo. Y para eso habló con parlamentarios y gente de La Moneda”, afirma uno de ellos. Desde su puesto en el Mineduc, dicen, ayudó mucho a que se nominara a Bermúdez.
El 12 de septiembre de 2016 asumió como subcontralora general y jueza de Cuentas. Hoy, para mantener el cargo, Pérez invocará un artículo de Contraloría que indica que solo el Presidente puede removerla.
Según informa este jueves La Tercera, Bermúdez informó de su decisión a los trabajadores del órgano contralor a través de un correo electrónico, en el que además agradece a Pérez por el servicio prestado “en las diversas labores que ha servido como funcionaria de nuestra Contraloría”.
Esta medida de Bermúdez se produce tras una serie de desencuentros entre ambos, los que se habrían acrecentado luego de que se conociera que el fiscal Eugenio Campos, quien indaga el fraude en Carabineros, citaría a la abogada de la U. de Chile para que declarara en la causa.
Ambos se conocieron en 2007, cuando Dorothy Pérez trabajaba en la Contraloría Regional de Valparaíso y Bermúdez era profesor de Derecho de la U. Católica de Valparaíso. En ese periodo, la abogada trabajaba en la Unidad de Personal de la Administración del Estado y a fines de ese año fue nombrada contralora regional de la zona, cargo que mantuvo hasta 2010.
Pérez había tenido una ascendente carrera al interior de la institución desde su ingreso en 2004, como abogado de la División de Vivienda, Urbanismo, Obras Públicas y Transportes.
Cuando Ramiro Mendoza fue nombrado contralor, fue ascendida a subjefa de Auditoría Administrativa en Santiago, lugar en el que se mantuvo hasta 2014.
En marzo de ese año, con la llegada del segundo gobierno de Bachelet, fue reclutada por Nicolás Eyzaguirre para asumir como jefa de la División Jurídica del Mineduc, donde trabajó hasta enero de 2016, cuando volvió a la Contraloría como jefa de gabinete de Bermúdez.
Para la elección del sucesor de Mendoza, a fines de 2015, dos personas que trabajaron con la subcontralora afirman que “movió todos los hilos” para que el elegido fuera Bermúdez. “Ella encontraba que era la mejor carta por sus características humanas y de trabajo. Y para eso habló con parlamentarios y gente de La Moneda”, afirma uno de ellos. Desde su puesto en el Mineduc, dicen, ayudó mucho a que se nominara a Bermúdez.
El 12 de septiembre de 2016 asumió como subcontralora general y jueza de Cuentas. Hoy, para mantener el cargo, Pérez invocará un artículo de Contraloría que indica que solo el Presidente puede removerla.
