El diputado UDI Jaime Bellolio llamó al Gobierno a acelerar la tramitación del proyecto de ley que sanciona con penas de cárcel la colusión, tras la denuncia de la Fiscalía Nacional Económica contra las tres principales cadenas de supermercados por acordar precios en la carne fresca de pollos.

Junto con afirmar que “claramente, lo que estamos viendo hoy día es que la Fiscalía está haciendo un buen trabajo”, Bellolio sostuvo que “nadie puede permitir que las empresas le metan la mano a los bolsillos de los chilenos haciendo trampa, eso es algo inaceptable. Nosotros tenemos que condenar con mucha fuerza las prácticas de colusión”.

En opinión del parlamentario, “la colusión es algo gravísimo”, dado que “se trata de un perjuicio directo a las personas” y “porque atenta contra la esencia de una economía libre. Quienes creemos en una economía libre no podemos sino condenar con la mayor fuerza las prácticas colusivas”.

“Queremos pedirle al Gobierno que acelere el proyecto que sanciona con cárcel la colusión, que ya aprobamos en la Cámara de Diputados y hoy día está en el Senado. Claramente, urge aprobar este proyecto para que nunca más tengamos casos en que las empresas sientan que tienen impunidad para coludirse o hacerle trampa a los consumidores chilenos”, afirmó.

El diputado insistió en que “nosotros ya hemos tenido varios casos similares, por lo tanto, es urgente tener una ley como la que aprobamos aquí en la Cámara de Diputados, que sanciona con cárcel y mayores penas la colusión, para que no suceda más algo como esto y que, además, no signifique una ventaja para una empresa coludirse”.

Según precisó, “con la ley actual, lo que ocurre es que a las empresas les sale más ‘conveniente’ coludirse y pagar la multa que no hacerlo, por tanto, una pena de cárcel -que nosotros votamos favorablemente- es algo que puede minimizar ese efecto”.

Consultado sobre si puede hablarse de casos excepcionales o más bien se trata de prácticas generalizadas, Bellolio citó el texto del economista Luigi Zingales, titulado “Salvando al capitalismo de los capitalistas”, “donde da cuenta que esto no es algo excepcional ni en Chile ni otras partes del mundo, sino que puede estar ocurriendo por malas regulaciones”, dijo.

“Tenemos demasiados casos puntuales. En Chile tenemos mercados que están demasiado concentrados, y una de las razones de ello es porque hay regulaciones que son absurdas, que al final terminan haciendo que aquellas empresas que eran favorables a la libre competencia, terminan más bien siendo capturadores de renta, Necesitamos mayor competencia para que no sea beneficioso para las empresas hacerles trampa a los chilenos”, finalizó.