La Presidenta Michelle Bachelet espera que el próximo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, mantenga “una relación de respeto y cooperación” con América Latina y se mostró satisfecha con el avance de su cuestionada reforma educacional en una entrevista con la AFP.
A 13 meses de dejar el poder y en la antesala de la visita que realizará este fin de semana a Chile su homólogo francés, François Hollande, Bachelet dijo además que la elección de su sucesor está aún “abierta” y se mostró optimista de poder aprobar una ley de aborto terapéutico.
– ¿Qué política espera Donald Trump para América Latina? ¿Comparte los temores de que aumentará el proteccionismo?
– No hemos escuchado efectivamente un planteamiento más concreto hacia América Latina; esperamos que pueda continuar una relación de respeto y cooperación entre América Latina y Estados Unidos.
La palabra aquí es expectante. Todo el mundo está esperando saber cuáles van a ser los planteamientos y cuál va a ser la importancia que efectivamente le dé el presidente Trump a la región.
¿Cómo vislumbra la relación bilateral de Chile con Estados Unidos?
– Chile ha tenido una histórica buena relación con Estados Unidos (…) y esperamos que esas relaciones continúen así.
– ¿Una eventual retirada de Estados Unidos del TPP, que Chile suscribió y promovió, supondría la muerte de dicho tratado?
– Está todo el mundo muy expectante, pero el resto de los países quiere seguir adelante o transformarlo en otro tipo de acuerdo.
– El sábado su homólogo francés, François Hollande, realizará su primera visita a Chile. ¿Qué espera de esta visita?
– Tenemos una historia de buenas relaciones políticas producto de compartir los valores esenciales: la democracia, derechos humanos, y queremos seguir avanzando en esta relación. Vamos a firmar acuerdos en los sectores de la cultura, defensa, turismo, cooperación en la lucha contra el narcotráfico, un tratado de extradición, educación.
Queremos actualizar el acuerdo de asociación con la UE y queremos que el presidente nos apoye en este proceso, también queremos conocer su opinión sobre la discusión en la OCDE de graduar a los países para que salgan del sistema de la cooperación los países que han tenido un desarrollo económico adecuado.
REFORMAS SOCIALES, ELECCIONES Y MUJER
– ¿Está satisfecha con el desarrollo de su programa de reformas, sobre todo la educativa, que pretende acabar con el legado de la dictadura de Augusto Pinochet?
– Hasta ahora lo que ha salido, ha salido bastante en la línea de lo que queríamos. Tenemos todavía casi 13 meses por delante para sacar adelante los temas que nos importan.
Lo que está en la base de la reforma a la educación, es mirar la educación de una manera distinta, considerar que tiene que ser un derecho social y no un bien de consumo.
– ¿Espera poder promulgar durante su gobierno la ley que despenaliza el aborto en tres causales: violación, inviabilidad fetal y riesgo de vida para la madre, en uno de los pocos países en el mundo donde la interrupción del embarazo está prohibida en todas sus formas?
– Espero que sí. Creo que las mujeres tenemos derecho a tomar decisiones y lo que un estado no puede hacer es imponer una perspectiva, imponer una política pública exclusiva.
El proyecto no incentiva la interrupción del embarazo, no promueve la interrupción del embarazo, promueve la posibilidad de que las mujeres de manera informada y acompañada puedan tomar la mejor decisión.
– ¿Cómo analiza el proceso electoral que culminará en noviembre próximo con la elección de su sucesor en La Moneda?
– Hoy día no hay nadie que pueda decir: yo estoy sentado en La Moneda el 11 de marzo de 2018. Todo está abierto.
– ¿Considera que hay un desgaste de las ideas de izquierda en América Latina?
– Si bien es cierto que efectivamente en varios países ganaron candidatos de centro centro-derecha no sé si uno puede sacar una conclusión para la región en su conjunto
– Usted es la única mujer que queda como presidenta en América Latina. ¿Cree que la política todavía es para ellas un terreno escabroso?
– No tienen que ser siempre mujeres. Se puede elegir mujeres y se pueden elegir hombres (…) pero creo que (en América Latina) estamos al debe con las mujeres en la política.
Y aunque no se puede garantizar que haya siempre candidatas a presidenta de la república que tengan siempre opción a ser electas, creo que al menos se ha terminado como el tabú de pensar que las mujeres no pueden ser presidentas.
Cuando yo era chica nunca hubiera imaginado una mujer presidenta, porque en el mundo en el que yo vivía no existían. Hoy día ese no es el imaginario que tienen los niños chicos. Para los niños chicos, es normal que puedan haber mujeres presidente de la República y con todo creo que es un avance pero nos falta avanzar mucho más.
AUTOR: Ricardo Pérez V.
FUENTE: AFP