La Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputados aprobó en general y por unanimidad el proyecto de ley que busca fortalecer la seguridad en los recintos penitenciarios.
Ambos textos proponen modificar el Código Penal. El primero corresponde a un mensaje del Ejecutivo (boletín 16.984) que propone ampliar la penalización dispuesta en el artículo 304 bis del citado código para fortalecer la seguridad perimetral de los recintos penales.
Dicha norma, incorporada por la Ley 21.494, sanciona el ingreso de dispositivos o elementos de telecomunicaciones, como celulares.
Pero, ahora propone ampliarlo a “todos los supuestos en que se ingrese, favorezca el ingreso o se intente el ingreso de objetos que pudiesen representar un riesgo para las personas o condiciones de seguridad al interior de los recintos penitenciarios”. Asimismo, señala que se presumirá dicho riesgo si la conducta se realiza o intenta mediante lanzamientos desde el exterior del recinto.
El segundo, en tanto, plantea ampliar las sanciones por ingresar elementos prohibidos a establecimientos penitenciarios .
En esa línea, propone modificar el mismo artículo y sancionar con la pena de presidio menor en su grado mínimo a medio a quienes ingresen o intenten ingresar elementos prohibidos al interior de los recintos penitenciarios y supongan un riesgo para la seguridad en este.
Además, que las conductas aludidas se entenderán ejecutadas de cualquier manera o por cualquier medio que se emplee para lograr el ingreso del elemento prohibido.
FUNDAMENTOS
Ambos proyectos buscan hacerse cargo de una práctica con alta prevalencia y que pone en permanente riesgo la seguridad de las cárceles, como es el ingreso de objetos mediante su lanzamiento hacia el interior de los recintos, comúnmente denominados “pelotazos”.
Estos elementos, afirma el gobierno, favorecen la proliferación de la asociatividad delictiva, la organización con quienes se ubican en el exterior, el uso de artefactos u objetos que sirven como armas o el tráfico de sustancias estupefacientes.
La moción, en tanto, explica que existen diversos modos como envoltorios en forma de pelota, drones o incluso al interior de aves muertas, que son recogidos por los internos que están sobre aviso para su recepción.
Estas modalidades muchas veces hacen casi imposible la detección por parte del personal de Gendarmería que como vigía controla el recinto penal en torres y murallas.
Tras su aprobación general, la comisión acordó fijar el viernes 23 de agosto como plazo para presentar indicaciones e iniciar así su votación particular.
Consultar boletín 16.984 y 16.569.
(Fuente: Cámara)
