La Armada, a través de su dirección de comunicaciones, informó que se detectaron cinco casos similares al del espionaje que hizo un marino a sus compañeras en la fragata Lynch y por el cual se inició una exhaustiva investigación.
“Existen otros 5 casos relacionados con transgresiones a la normativa que debe observar el personal institucional en sus relaciones interpersonales. Ellos han sido investigados y sancionados, – incluyendo el retiro del servicio – en los niveles jerárquicos correspondientes o bien se encuentran actualmente en etapa de investigación y de corroborarse los hechos, se aplicarán las medidas disciplinarias que la reglamentación contempla. Asimismo, los antecedentes han sido oportunamente remitidos a las respectivas Fiscalías, a fin de determinar la eventual existencia de delitos”, destacó la institución.
A través de un comunicado, la Armada aseguró que “con el propósito de proteger la integridad de las afectadas y no entorpecer las investigaciones que lleva a cabo la Fiscalía, la Institución no está facultada para entregar más antecedentes sobre estos casos, comprometiendo la mayor colaboración y rigor en la aplicación de los reglamentos hacia quienes resulten responsables”.
“Este tipo de situaciones, constituyen faltas a la disciplina que son repudiadas por la Institución entera y son y serán sancionadas con la máxima rigurosidad. Adicionalmente, la Armada mantiene una revisión periódica y sistemática de sus procedimientos y protocolos, actualizándolos permanentemente e instruyendo al personal para que sean conocidos y aplicados por todos, con el objeto de evitar que hechos como los acaecidos vuelvan a repetirse”, sentencia el texto.
AUTOR: Patricio Gutiérrez Villagrán
FUENTE: La Nación