Argentina intenta contener una plaga de langosta que ingresó a fines de mayo desde Paraguay y que podría trasladarse hacia sus vecinos Uruguay o Brasil, según las autoridades de sanidad agroalimentaria.
La impresionante manga de langosta, que se ha desplazado ya por varias provincias argentinas, no constituye un riesgo para la salud humana ni animal, precisaron las autoridades, y hasta ahora no ha causado daño a los cultivos.
La plaga se ha desplazado ya a través de unos 1.000 kilómetros desde que ingresó a Argentina por la provincia de Formosa. Con capacidad para avanzar hasta 150 km diarios, ha atravesado también las provincias de Chaco y Santa Fe, y se encuentra actualmente en Corrientes, en cercanías de Entre Ríos.
“Los equipos del Servicio nacional de sanidad y calidad agroalimentaria (Senasa) y la provincia de Corrientes se encuentran trabajando para detectar la ubicación actual de la manga, debido a que no hay un lugar preciso de la zona en donde descendió”, informó un comunicado.
“Prácticamente la manga no se ha movido por las bajas temperaturas, que las afecta notablemente”, indicó Héctor Medina, ingeniero agrónomo del Senasa.
El Ministerio brasileño de Agricultura declaró el jueves el “estado de emergencia fitosanitaria” en los estados de Rio Grande do Sul y Santa Catarina, para facilitar la adopción de medidas preventivas ante la eventual llegada de la plaga de langostas, aunque reconoce que es poco probable que esto finalmente ocurra.
Invasiones similares de langosta procedentes de Paraguay se registraron también en Argentina en 2017 y 2019.