Una alerta acerca del fentanilo, un potente analgésico que aparece camuflado con otros fármacos, lanzaron las autoridades estadounidenses.

En Tennesse dijeron haber documentado docenas de casos en los últimos meses en los que fármacos identificados como oxicodona o Percocet, opiáceos menos potentes, resultaron contener fentanilo, una sustancia mucho más potente.

El fentanilo, que suele venderse para tratar el dolor crónico en pacientes con cáncer terminal, es de 25 a 40 veces más potente que la heroína. Adecuadamente prescrita, suele administrarse a través de un parche en la piel. El fentanilo producido para el mercado ilegal procede de México, y se han rastreado componentes químicos similares con origen en China, según la agencia antidroga de Estados Unidos, DEA.

El Departamento de Salud, en San Francisco, atribuyó varias sobredosis el verano pasado a supuestas pastillas de Xanax que contenían fentanilo, mientras que Canadá ha emitido advertencias tras varios casos de píldoras con aspecto similar a la oxicodona pero que contenían fentanilo.

Según se indicó, agentes federales detuvieron en febrero a un hombre en un suburbio de Cleveland tras incautar más de 900 píldoras de fentanilo marcadas como si fueran de oxicodona.

Por otra parte, se atribuyó a las píldoras camufladas la causa probable de las 19 muertes por sobredosis de fentanilo registradas sólo en enero en el condado de Cuyahoga.