El profesional indicó que su petición, aceptada por el tribunal de alzada capitalino, se fundamenta en que “me entregaron antecedentes importantísimos para la defensa”, luego que se anexara un nuevo libelo a la causa en la que se le imputa al cardenal el ocultamiento de los abusos cometidos por el excanciller del Arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz Toledo.
Se trata de la querella contra el sacerdote Tito Rivera, denunciado por una violación al interior de la Catedral Metropolitana y por la que Ezzati también podría ser objeto de indagatoria por encubridor.
“Fuimos notificados ayer vía correo electrónico sobre una querella deducida precisamente en contra del señor Tito Rivera y contra todos los que resulten responsables”, indicó el jurista, añadiendo que “me llama profundamente la atención que en un asunto tan puntual, el sobreseimiento definitivo en un caso concreto y específico, se trate de contaminar con otra causa”.
El defensor recalcó que Ezzati “está tranquilo, esperando la decisión de la Corte de Apelaciones”, y volvió a descartar cualquier participación del cardenal tanto en los hechos relacionados con Muñoz Toledo como en los expuestos en las nuevas denuncias, las que enfrentará -dijo- “como todo ciudadano común y corriente”.
Por su parte el abogado querellante en la causa de Muñoz Toledo, Juan Pablo Hermosilla afirmó que su contraparte está en su derecho de solicitar la suspensión, que se postergó para la próxima semana, pero la calificó como una maniobra dilatoria.